sábado, 31 de marzo de 2012

Entrevista en Ergo Sum


En el mes de enero, durante una visita a Mayra Oyuela, una muy querida amiga, me convenció de hacer dos locuras, presentar "Partiendo a la locura" y aprovechar la semana visitando Ergo Sum, una propuesta radial muy interesante en el que Mayra comparte con Oto Wilches y Andrés Papousek y que se transmite semanalmente desde la página web del Centro Cultural de España en Tegucigalpa.

Les dejo la entrevista para que la desacarguen, Entrevista en Ergo Sum el 26 de enero de 2012.

lunes, 26 de marzo de 2012

UniversosDiversos: Un diálogo que se construye en colectividad


Con la clara intencionalidad de romper con los códigos culturales actuales en nuestra sociedad, se sigue sumando a la gran lucha por la igualdad entre hombre y mujer la voz de las mujeres artistas. Esta vez, desde un proyecto que adelanta con convertirse en el foco de atención de la discusión sobre el tema: mujer y obra de arte.

UniversosDiversos, surge como un proyecto que se presenta más como un proceso que como algo efímero, en esta primera etapa, los derechos sexuales y reproductivos de la mujer, fue el eje temático de las piezas pues de la misma manera el ciclo de talleres con el que se partió surge por la necesidad de abordar éste y otros temas entre mujeres.

Partiendo de la cosmovisión individual de las participantes a la formulación de conceptos colectivos, hasta llegar a la creación, se vuelve interesante como la multidiciplinariedad pone al descubierto la diversidad del pensamiento femenino.

Los antecedentes inmediatos a la muestra parten de la idea de generar un proceso de sensibilización con mujeres creadoras de arte en un primer ciclo de talleres sobre los derechos sexuales y reproductivos de la mujer, ya lo mencionábamos arriba, pero hoy en día como en el pasado y hasta que una verdadera igualdad no se materialice, esto no bastará.

No digo con esto que UniversosDiversos debe desacreditarse, por el contrario, me parece una propuesta noble, que hace que miremos hacia las aristas adecuadas, que el problema de la violencia contra la mujer y los femicidios nos coloca en situaciones absolutamente atroces y que en muchos de los casos el anonimato se convierte en una cosa aún mucho peor.

Es el arte entonces una herramienta necesaria para sensibilizar, pero de ahí, de las piezas mismas, tan solo es el punto de partida, lo demás aún está por construirse, y la mujer sola no lo hará posible, aquí es necesario que los hombres nos vayamos sumando de una vez por todas a la reivindicación de la mujer.

Parece ser entonces que UniversosDiversos abre el debate, o nos empuja a ver que el debate ya días ha estado abierto y que nuestro machismo nos ha cegado durante miles de años.

¿Cuántos más necesitamos?

domingo, 18 de marzo de 2012

Resurgir al mundo

Por: Héctor Flores

Gracias Fabricio por destaparnos las Blancas Piranhas

Resurgir al mundo, en este mundo moderno, no es nada fácil. Resistir a las tentaciones globales y hacer opción por lo local es cosa de locos. Pensar en la política limpia como oportunidad en un espacio en donde la política es sucia es casi utopía; viajar en busca de sueños en un mundo donde el insomnio gobierna es idílico. Escribir un libro, cuando todo mundo quiere leer en un kindle y, que de paso ése sea un libro de poesía, es sin duda una actitud valiente. Y de esas actitudes valientes quiero hablar ahora.

Como lo dije en otras ocasiones tengo la suerte de presumir que leo porque la mayoría ya no quiere hacerlo y, dicho sea de paso, porque tengo amigos que me permiten hacerlo gratis. Nada mejor que tener un libro en las manos, sentir el papel y seducirlo y seducirse. Esa sensación me dejó tener, en mis manos el libro del poeta Fabricio Estrada. Leer su poesía, asumir sus utopías e intentar, desde ellas mismas, reescribir la esperanza.

Blancas Piranhas

Es un regalo para el buen gusto. Un toque de magia poética para los que nos cuesta más soñar lo imposible y nos permite reencontrarnos con la ruta de lo posible. Esa una selección eficaz de palabras y conceptos evidentes en la sociedad actual, elementos que no podemos olvidar, olvidos que de ser posibles no se pueden perdonar.

Es una especie de manual para no tener miedo a soñar, para no temer al dolor que nos provocan las balas sistémicas de este imperio que se consolida, ni nostalgias por aquellas cosas que pudieron ser y no fueron, pero que no necesariamente significa que no tengan tiempo todavía.

Es una comparación genial de la vida nacional con el río. Y en ese río flotan las piranhas, flotan los sueños y nadan los que no quieren perderse, los que no quieren ser comidos, los que buscan no ser devorados por los afilados dientes de tan especiales criaturas. Del sistema.

Es una mirada poética a ese día a día que desde una sutil manera, con detalles algunas veces imperceptibles: la manera de sentarse, incorporarse, la forma de ser en el trabajo y dejar de ser en la vida, nos impone una lógica que se contradice con la lógica ancestral de nuestros pueblos.

¿Por qué leerlo?

Pues porque es un poemario en el esplender de la palabra. Una recuperación de la memoria histórica desde la concepción misma de la vida en su andar. Un verso cántico al Juana Laínez y sus trompetas históricas, llamándonos primero para el almuerzo y ahora para el entierro cuando el modelo no nos deja nada para comer.

Hay que leerlo porque no basta la luz del día, ni los olores de la mañana, ni los barriletes sobre el estadio, o el olor de los mercados, para comprender que en la vida ayer fuimos unos y ahora somos otros. Otros sin necesariamente ser lo que queríamos, otros sin ser para los otros, otros desde las lógicas de un sistema que no reconoce los seres humanos, por privilegiar las corporaciones y entre ellas las grandes transnacionales.

Porque es un canto a la lucha de clases que, silenciosa y sangrante, sigue imponiéndose entre los que lo tienen todo contra los que no tienen nada. Una lucha por hacer un pueblo distinto, con gentes diferenciadas por sus condiciones propias de identidad, pero unidas y solidarias desde su opción de hacer por los otros. Es un canto a la diversidad que nos da la posibilidad de ser complementarios, al mundo en su conjunto.

Cuando lo local hace al latino americanismo

Creo que una de los grandes aportes de Blancas Piranhas porque en el topamos con una poesía regional que tiene sus énfasis en lo local. Versos que salen de Tegus pero que caben en cualquier rincón de esta gran patria que llamamos Latinoamérica. Que caben porque nuestras historias se entrecruzaron un día cuando la misma piraña que se comió al indio amazona se viene comiendo al indio centro americano y hondureño.

En las poesías de Fabricio se siente el sabor del pueblo, de sus orígenes y de sus juegos de siempre. Se respiran los aires de esa Tegucigalpa que lo recibió y de las calles y los mercados de donde sacó tonadas para escribir estos versos. Es una mezcla de nostalgias vividas a plenitud y una explosión natural contra todo eso que nos quiere arrancar el derecho a ser auténticos, a volar con nuestras propias alas.

Leer a Fabricio es leer al pueblo, conocer los sentimientos de ese pueblo, saber lo que quiere ese pueblo. Sus poesías son la relación más cercana entre todo lo que sucede en el diario vivir y, si eso fuera poco, la voz de la demanda popular por construirse otros tiempos, otros modelos menos esclavistas y un mundo para todos dividido. Es un libro con poesías valientes que te invitan a sumergirte en ese mundo de falsedades, donde todos son blancas palomitas de día y por las noches vampiros chupasangre, y desde ellas y con ellas soñarse la posibilidad de cambiar. De cortar de raíz el mal que asecha las grandes bondades latinoamericanas y sumerge en la desgracia la grandeza de este pueblo hondureño.

Pero también cuando leo a Fabricio siento a Roque y su empedernido amor por dejar azul de esperanza en definitiva al pequeño Centro Americano, descubro a Ernesto Cardenal iluminado y sobrio en Solentiname haciendo cantos cósmicos y rememorando las revoluciones perdidas. Veo a Benedetti ya sin treguas frente a la muerte pero vivo en ese sur que también existe, a Pablo Neruda cabalgando el viento de esa isla indomable hacia la libertad y, por sobre todo, me encuentro a Roberto Sosa, en su canto de amor por los pobres que son muchos, que no se pueden olvidar y menos ahora, cuando este joven poeta, Fabricio Estrada, nos recuerda que esos pobres nadan en ríos en donde las piranhas no son como las de aguas amazónicas que cazan por el instinto natural de comer, sino que éstas son sanguinarias, arpías, depredadoras y que cazan por el instinto natural de joder.

Hay que leerlo porque es un canto nacional que tiene madera para volverse latinoamericano, y porque todos lo que tengamos trincheras en los suelos donde germina la esperanza, estamos obligados a leer, a conocer otras propuestas y con ellas hacer nuestros caminos. La individualización, el creerse superior a los otros y el marginar a los demás por razones geográficas, demográficas, sociales y de popularidad son las características más perjudiciales que puede tener una persona, que dice que comparte el sueño de hacer otros mundos posibles con los otros, sus hermanos.

¿Por qué hablo de Fabricio?

Porque creo que en este momento de la vida en donde todas las instituciones, incluidas las que formamos aquellos que nos llamamos izquierdistas, o que nos pensamos mundos distintos, hemos perdido de vista que lo que debe tener de fondo todo nuestro quehacer es la dignificación de la persona humana. Es decir, que si hablo de la poesía de Fabricio estoy obligado a conocer algo de su persona, y desde esa condición para muchos efímera, vincular la obra literaria de este autor con la forma de vida de este hombre de familia que se divide en malabares para llevar su barco familiar, sin descuidar el barco social de su patria, por los ríos infestados de piranhas blancas que hay en la cotidianidad hondureña.

Porque creo que somos muchos que nos hemos tomado la molestia de leerlo ya, incluso los que de alguna manera compartimos espacios y redes A y R y todo lo demás que sea posible, pero no basta con eso, lo bueno se debe resaltar, se debe compartir, se debe mover para que promueva a otros esta loca manera de soñarnos despiertos otra patria.

Yo tuve el agrado de tomarme un café en el patio de su casa, con otros compas a los que les tengo mucha empatía, con su compañera: también poeta, y unos cuantos gatos que nos recordaban la necesidad de escalar los muros de la vida dividida que nos dejan unos cuantos, para recuperar la vida en plenitud que nos supone la utopía que perseguimos. Y vi al Fabricio, al hombre, al poeta, al iluso, al soñador… lo vi en plenitud. Tengo, abusando de todos los preceptos posibles, la convicción de que vi un hombre que no sólo se refleja en la poesía que escribe, sino que se sueña en la familia que tiene y en la sociedad que les quiere heredar.

Un café con matices bohemios, entre árboles, con libros, con las tostadas propias de los pueblos y la esperanza de ser en cada sorbo. Un momento en el que fuimos capaces de nadar por este río de nuestra historia, en sus complejas aguas modernas y las posibles corrientes futuras, sin el miedo de que las Blancas Piranhas que Fabricio nos describe en su libro, amenazaran con devorarnos de una sola a los que ahí estábamos.

Termino diciendo que una de las cosas que más me gustan de este poemario es la conexión existente entre el hombre y el verso, entre la humanidad y lo ideológico, entre el sueño y la realidad y sobre todo, entre lo local y lo regional latinoamericano. Un gran salto, un gran poemario, un gran regalo…. Ojalá los que todavía no lo han leído lo hagan y que los que ya lo leyeron tengan la valentía de reconocérselo al autor, que si bien escribe desde el anonimato que sus utopías le permiten, no está demás que ésos, sus amigos, le den un espaldarazo de vez en cuando…

viernes, 16 de marzo de 2012

El vértice oculto de la blogsfera: Marel Alfaro

Una de las necesidades más impetuosas del ser humano es la comunicación, con una diversidad de formas en las que ésta se nos puede presentar y sin llegar a ser pretencisos, les damos la bienvenida a la entrevista que hemos hecho a Marel Alfaro, uno de los tantos jóvenes cuyo recurso de diálogo es la blogsfera.

Les invitamos también a dar una vueltecita por el Yolyo Maya, y construir un diálogo común con Marel.

El Jamo: Le das la bienvenida a la gente en tu blog con “Porque hoy en día nadie vive de la poesía... y ¿quién dijo que yo soy poeta?”, pero sé además que pintas, dibujas, has estado en algunos proyectos que me veo obligado a empezar preguntando: ¿Poeta o narrador?

Marel: Es quizá una bienvenida un poco contradictoria pero puntual en cuanto al mensaje, jamás me he considerado “poeta”, y en nuestra sociedad a todo aquel que escribe, por abstractas y difusas que sean sus ideas, se le denomina de dicha manera. No creo en el auto denominarme escritor o literato, mucho menos poseo anhelos de lucro y una vida basada en la supervivencia que emane de las letras, me considero a mí mismo narrador de mis ideas, experiencias y abstracciones, haciéndola en la mayoría de las ocasiones como socializador de las mismas.

El Jamo: Tu blog, recientemente cumplió un año, ¿cómo ha sido el proceso desde ese primer post? ¿Por qué un blog?

Marel: Interesante, desde el primer trabajo publicado, aunque no ha sido nada fácil lograr calar en el público previsto, pero ahí vamos día a día haciendo la lucha. La idea de hacer uso del blog como medio de difusión, surge de una experiencia previa, y para ser sincero, me vi a mí mismo publicando en un blog y compartiendo el espacio con otros usuarios de las lecturas en línea.

El Jamo: “Melodía” de Ana Alas, “Lágrimas” y “Preguntas” de Blanca Escalante, están en tu blog, ¿qué te ha llamado la atención de ellas?

Marel: En un principio creé el blog para que éste se convirtiera en un espacio amplio para la publicación de los trabajos de otras personas, sin embargo, la idea nunca se materializó y fue así que monopolicé el espacio para mis propias publicaciones. Ana, ex compañera de estudios a nivel de educación media y entrañable amiga, y Blanca, estimada y querida amiga de lucha, cada una con un estilo distinto de contar las cosas, pero sin lugar a dudas al igual que yo, deseosas de un lugar en donde publicar sus ideas y por ende que éstas sean leídas.

El Jamo: ¿Crees que la poesía en Honduras está siendo escrita por mujeres más que por los hombres?

Marel: Actualmente sí, y todo parte del contexto actual en el que vive nuestra sociedad, generando de una marcada manera la publicación de trabajos meramente encaminados a expresar el descontento de la mujer ante una realidad que no es nada halagadora y que en su condición se vuelve día a día socialmente hostil.

El Jamo: Con todo el avance de las redes sociales y con la evidente realidad de que en la web la gente no suele leer textos extensos, ¿hacia dónde va la blogsfera en Honduras?

Marel: Todo apunta a una clara y marcada evolución, es decir, al uso y elaboración de textos encaminados con el fin de expresar en pocas palabras lo que para el lector sería imposible de descifrar en extensos y elaborados escritos, ejemplo preciso, el fenómeno de la micro nóvela a nivel latinoamericano, la cual a su vez ha generado un nuevo interés en el lector por volver más complejos sus hábitos de lectura y por qué no también de escritura.

El Jamo: ¿Qué blogs consideras que son los más consistentes en su propuesta?

Marel: El fenómeno blog en nuestro país se limita a espacios meramente marcados, sean estos los blogs de literatura y música, sin embargo, valga la aclaración dicho medio no es ni siquiera sub utilizado por nuestra sociedad, ya sea por carencia de información o poca socialización de las bondades del uso del blog.

El Jamo: ¿Pensas publicar en papel?

Marel: La verdad, sí. En lo personal llevar mis ideas a una publicación en papel sería una especie de auto realización literal, ya que en un país donde leer es visto como la peor de las blasfemias, sería interesante aportar un granito de arena a la subversión y herejía de las letras que de una u otra forma transmitan ideas claras a quien pueda leer nuestra propuesta.

El Jamo: Ahora, sabemos que nada es gratuito:

Una canción:

Marel: “Coming back to life”, Pink Floyd.

El Jamo: Un poema:

Marel: “Táctica y Estrategia”, Mario Benedetti.

El Jamo: Un autor:

Marel: José Saramago.

El Jamo: Una película:

Marel: “El Sueño de Valentín”.

El Jamo: ¿Todo esto te ayuda a escribir?

Marel: Sin lugar a dudas que sí, pero como ya lo había contestado en otras ocasiones, la inspiración es prestada. Te la presta el entorno, tus miedos, tus anhelos, un par de ojos, y por qué no también, tu diario vivir.


sábado, 10 de marzo de 2012

"Random n° 2" publicado en la Mera V

Salió la número 3 de la revista Mera V y en la cual incluyeron mi relato "Random n° 2" que forma parte de mi próximo libro, esta revista digital es un interesante proyecto editorial independiente que impulsa algunos amigos, entre ellos están Magdiel Midence, Nincy Perdomo y Edgardo Florian.

Todos los números de la revista están gratis directamente en su blog, decargala ya aquí.

jueves, 8 de marzo de 2012

Juana, esa sujeto...


Yo me niego a tener ninguna etiqueta, pero en Polonia las feministas tienen muchísima razón y muchas cosas por las que luchar: por los sueldos, por derechos que tienen que ver con su cuerpo, porque todavía hay resortes reaccionarios en la Iglesia... Sueño con el momento en que las feministas no sean necesarias.
Wislawa Szymborska



"Nosotras: esas sujetos" de Juana Pavón


Una, dos, cien, miles
así vamos las mujeres por aquí
aquí donde nos tocó pernoctar para siempre.
No importa lugar ni apellido
definimos nuestra situación
desde hace mucho tiempo.
Hemos aceptado el papel que nos corresponde
no importa el status.
Estamos las privilegiadas
y las no privilegiadas
Estamos:
la funcionaria porque funciona
la obrera por obrera
la madre por madre
la estéril por estéril
la dama por dama
la prostituta por prostituta.
Hacemos maniobras con el tiempo
ligadas a esta inercia
que llamamos vida
porque siendo mujeres
tenemos que aceptarlo
porque son leyes para mujeres
hechas por hombres
¿qué más nos da?
Las habemos flacas y gordas
unas por tomar agua de masa
otras, por tomar leche y cereal.
El día de la madre
a unas nos da frío
a otras nos da calor,
el día de la mujer
a unas nos da risa
a otras satisfacción.
Estamos las poetas académicas
y las poetisas de la calle.
Estamos las que vendemos rosas
en una floristería elegante
y las que ofrecemos claveles
en una esquina de banco.
Nosotras, que somos anónimas
del amanecer
y nos-otras burbujas de hambre
nosotras somos esas – a la que se nos vende
y a las que se nos protege
hasta los ochenta años.
Somos la esposa ignorada
en un centro nocturno
y la sirvienta seducida.
Todas somos nosotras
a cada quien lo suyo
así fue repartido
sin ponernos a escoger.
Estamos las amargadas
y las indiferentes
las antisociales
y las socialísimas
las que damos de comer a nuestros hijos
en cucharita de plata
y las trágicamente miserables
que damos nuestros vástagos
a engordadoras y traficantes de niños.
Nosotras las que siempre callamos
y esperamos
las que tenemos motivos
para gritar
y no esperamos nada.
Estamos las saludables
porque tenemos un gato en casa
y estamos las enfermas
por una existencia solitaria.
Somos muchas las que bebemos champagne
y muchas las que bebemos guaro
las primeras fondeamos en cama
con sábanas de seda
y las segundas
en una escondida acera húmeda.
Estamos las feministas asociadas
y las lesbianas reprimidas
muchas asistimos al Catecumenado
y otras levantamos los ojos
para ver a Dios.
Así vamos todas nosotras
nosotras, esas sujetos
todas somos mujeres indestructibles
nada nos detiene
no importa si somos abogadas
si somos verduleras
médicas, tortilleras
maestras, campesinas
teatristas, pintoras
esposas, amantes
primera dama o última dama.
Un vientre nos une a todas por igual.
Somos las que motivamos
todos los sentimientos
ternura, delicadeza... amor
aunque haya en cada una de nosotras
una gata furiosa
o una gata sumisa.
Somos las que estamos paradas en el tiempo
y latimos... latimos... latimos!
somos río, mar
jungla, sol
luna y pulmón
¡somos patria!
- Yo siempre he pensado
que Honduras tiene nombre de mujer –

domingo, 4 de marzo de 2012

Pequeño ajuste a la mira en el arma de caza

Levantó la mano, dio un paso al frente y jaló del gatillo. 2 segundos después un ruido insoportable corrió por los aires.

Todos los perros quieren galletas a su regreso, menos yo que te quiero a vos.